El fenómeno blog no sólo ha cautivado al ciudadano de a pie. Son muchos los medios de comunicación que han visto en ellos una forma más "personal" de plasmar los acontecimientos de la actualidad política, cultural o deportiva. De este modo, diarios tradicionales y digitales como, por ejemplo,
El País,
El Mundo,
ABC,
La Vanguardia,
El Plural o
Libertad Digital han adaptado en sus páginas web las bitácoras como un complemento informativo más. A través de ellos, numerosos especialistas en distintos temas, periodistas, actores y escritores dan conocer su punto de vista sobre un determinado tema.
Estos blogs no son homogéneos, sino que hacen de la diversidad su principal atractivo. Ejemplos hay de sobra: La Vanguardia ofrece contenidos informativos, mientras que El Plural muestra una interpretación de los hechos que han sido noticia a lo largo del día. Pero para no entrar en apreciaciones más o menos simplistas, lo mejor es ver uno por uno los blogs y, de este modo, apreciar sus distintas características.
La página web del diario El País ofrece a sus visitantes una gama de blogs de lo más variopinto. Quizá el que llama más la atención es el análisis que de la guerra de Irak hace
Saad Eskander, Director de la Biblioteca Nacional de este país, quien sin tapujos y con todo detalle denuncia la situación en que se encuentra la población iraquí desde la invasión estadounidense en marzo de 2003. Pero la gama de blogs de El País no sólo abarca temas tan desgarradores como el de la contienda en Irak, también a través de distintas temáticas algunas bitácoras consiguen sacar más de una sonrisa a toda aquella persona que los lea. Es el caso del Blog de
Nacho Vigalondo o el de
Patxi Urmeneta, creador de Kukuxumusu. Lo que caracteriza a todos ellos es que son opiniones, puntos de vista, apreciaciones de la realidad contadas de un modo que nuca aparecería en el diario formato papel.
La norma general en los blogs de los grandes diarios nacionales no abarca el análisis detallado y exhaustivo de los hechos, sino que tomando como punto de partida un tema general, desarrollan una redacción más concreta, más reducida y más accesible al ciudadano. Es lo que ocurre en la página web del periódico El Mundo, quien a través de bitácoras que abarcan materias tales como el
cine o el
"discurso cultural oficial", dan una visión más irónica y agresiva de la actualidad. Esta "posición editorial" de los blogs de El Mundo es fiel reflejo reflejo del punto de vista con el que abordan la actualidad política de España. Además, incluye como novedad un
foro a partir del cual los ciudadanos pueden hacer llegar sus críticas, sugerencias o alabnzas sobre la realidad que le rodea.
ABC, diario centenario de la prensa española, tampoco ha sido ajeno al fenómeno blog. Su
menú está compuesto por bitácoras que abarcan temas tan variados y originales como el cine, el motor, deporte, salud, vela, videojuegos, música, televisión, gastronomía... Al igual que en el resto de blogs pertenecientes a distintos medios de comunicación, en éste la actualidad es abordada desde una perspectiva totalmente distinta a como lo hacen desde sus ediciones impresas. Este punto de vista es más personal, original, transgresor y, sobre todo, más subjetivo, lo que convierte al blog en género aparte, en algo que nunca podrá ser considerado información pura y dura, ya que todos ellos están aderezados con una dosis muy importante de opinión.
Por último, el diario La Vanguardia puede ser considerado como el más ortodoxo en cuanto tratamiento de la información en los blogs se refiere. En ellos, distintos profesionales del periódico, ya sean corresponsales, redactores de mesa o colaboradores dan a conocer aspectos sobre la vida en otros países o incluso en la ciudad que viven que, por una razón u otra, no han recibido el tratamiento de noticia. Este es el caso de
Andy Robinson (Nueva York),
Rafael Ramos (Londres) o
Tomás Alcoverro (Beirut). A partir de estas valoraciones el lector puede comprender y hacerse a la idea de cómo es la vida en determinados países y, así, comprender muchas de las cosas que en ellos tienen lugar. Resumiendo, es una forma de acercar a la gente una cultura, un país, una ciudad, unas costumbres lejanas en el espacio físico pero cercanas gracias a Internet. Sinceramente, y esto lo afirmo a título personal, este tipo de blogs, los de La Vanguardia, son los que pueden mostrar el camino que haga que blog e información vayan de la mano.
Los diarios digitales son punto y aparte en lo que a blogs se refiere. En ellos, no hay un sólo atisbo de información. Únicamente son opinión o interpretación subjetiva de la realidad. Así, El Plural en su blog
El rincón del "Neocón" reflexiona y ofrece, desde un punto de vista satírico, qué es lo que puede llegar a pasar por la cabeza de una persona de derechas rancia.
Libertad Digital, sin embargo, muestra un tono totalmente distinto al diario de Enric Sopena. En su blog
Luis del Pino, padrino de los cargantes peones negros, no tiene ningún reparo en culpar sin pruebas ni documento alguno que lo demuestre (curiosa forma de hacer periodismo) al PSOE y a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado del mayor atentado terrorista en la historia de nuestro: el 11-M.
La prensa gratuita también se ha subido al carro de las bitácoras. Quizá el diario que mejor a entendido este fenómeno o qie mejor lo ha sabido adaptr ha sido
20 minutos. En él,
Fernando González Urbaneja, Presidente de la
Asociación de la Prensa de Madrid, o
Arsenio Escolar, director del periódico, dan cuenta desde su particular punto de vista de la actualidad del país. Estos blogs son muy interesantes, pues aunque están repletos de opinión, desde ellos se hace un análisis serio e inteligente de la realidad.
Aunque la mayoría tienen una intención informativa y de opinión, existen otros cuya finalidad es navegar y pasarlo bien, como es el caso de los dedicados al cine o la música en El Mundo o en ABC.
El fenómeno blog no ha pasado inadvertido pra los diarios deportivos. Como no podía ser de otra manera, el fútbol, el baloncesto y la Fórmula 1 tienen un lugar predominante en estos periódicos. Cabe destacar
Futblogging (repasa la jornada futbolística);
campo atrás (aborda el día a día del deporte de la canasta);
final de recta (narración del campeonato de F1 correspondiente), en
AS. O
"A la contra", de Juan José Anaut y
"Balón desastre", por Los Pablos, que repasan la actualidad futbolística en
Marca.com. Es importante resaltar que no sólo son profesionales de la información los que desde fuera reflejan la actividad de un gran torneo. Los lectores de la edición digital del diario El Mundo pudieron disfrutar de las anécdotas que
Rafa Nadal contó desde el torneo de Roland Garros de tenis. O de las que contó
Carlos Sainz desde los desiertos del Rally Lisboa-Dakar.
Se podría seguir diciendo miles de cosas sobre los blogs. Pero los ejemplos aquí mencionados son lo suficientemente relevantes como para que el lector se haga una idea del contenido de la blogosfera en la actualidad. Sí cabe decir, como, conclusión, que los blogs de los medios informativos son una prolongación de los artículos y columnas de opinión característicos de las ediciones impresas, ya que en la inmensa mayoría no aparece nada que pueda relacionarse con la opinión pura y dura.
Cabría plantear una cuestión al respecto, ¿deberían los blogs ser un foro en el que se mostrara opnión o deben considerarse un soporte alternativo de información? La pregunta suscitaría mil debates y provocaría otras tantas respuestas, pero, desde mi punto de vista, y tomando como ejemplo los publicados en La Vanguardia, los blogs deberían englobar un componente de información importante, pero siempre mostrada desde un punto de vista "alternativo".
Pero visto cómo se encuentra ahora el fenómeno blog, aún queda mucho camino poor hacer para que sea posible.
¿Hasta dónde es capaz de llegar una persona para conseguir fama, reconocimiento y notoriedad? Esa es una de las preguntas que surgen cuando se ve "El precio de la verdad", película que narra la historia de Stephen Glass, reportero estrella de la revista estadounidense The New Republic, famosa, por entre otras cosas, acompañar en sus desplazamientos al presidente de EEUU en el Air Force One.
